Semana sabática
Desde mi último post pasaron muchas cosas que me impidieron subir algo en esta semana.
Principalmente, no podía entrar al blog. Por alguna extraña razón, un misterio en ceros y unos, cada vez que intentaba entrar - no sólo a mi blog, sino a cualquiera dentro de blogia - me salía como si no existiese. Lo que es más, no podía ingresar siquiera a Infoaragon. Así que no pude postear nada aún sabiendo que el sistema funcionaba para otros blogueros conocidos. Son de esas cosas de las que no sabremos la causa.
La otra razón por la que no posteé nada fue: Semana Santa. No estoy diciendo que me fui de vacaciones todo el fin de semana, sino que estuve viviendo la Pascua como cristiano que soy. Con los Curas Operarios Diocesanos, que dirigen un Centro de Orientación Vocacional, organizamos el retiro espiritual de Pascua. Desde el Jueves hasta hoy al mediodía, estuve compartiendo mi tiempo en una casa de retiro en medio de la montaña junto a otras cuarenta y tantas personas. Obviamente, no tenía acceso a internet - no había computadoras de hecho - así que nada pude hacer al respecto.
Espero que hayan aprovechado el tiempo tanto como yo. Ahora volvemos a la rutina una vez más... espero.
Principalmente, no podía entrar al blog. Por alguna extraña razón, un misterio en ceros y unos, cada vez que intentaba entrar - no sólo a mi blog, sino a cualquiera dentro de blogia - me salía como si no existiese. Lo que es más, no podía ingresar siquiera a Infoaragon. Así que no pude postear nada aún sabiendo que el sistema funcionaba para otros blogueros conocidos. Son de esas cosas de las que no sabremos la causa.
La otra razón por la que no posteé nada fue: Semana Santa. No estoy diciendo que me fui de vacaciones todo el fin de semana, sino que estuve viviendo la Pascua como cristiano que soy. Con los Curas Operarios Diocesanos, que dirigen un Centro de Orientación Vocacional, organizamos el retiro espiritual de Pascua. Desde el Jueves hasta hoy al mediodía, estuve compartiendo mi tiempo en una casa de retiro en medio de la montaña junto a otras cuarenta y tantas personas. Obviamente, no tenía acceso a internet - no había computadoras de hecho - así que nada pude hacer al respecto.
Espero que hayan aprovechado el tiempo tanto como yo. Ahora volvemos a la rutina una vez más... espero.
2 comentarios
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Marta -
Hay que ver lo que has cambiado, desde postear un artículo todos los días, a dejarnos días enteros si leer nada por aquí :P
Ains, las escapadas hacen maravillosa nuestra rutina, no crees?