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Pensando

Si yo mandara...

1) ¿Qué sería lo primero que despenalizarías?
El votar que, al menos en Argentina, es obligatorio.

Si uno no vota (y no presenta un justificativo) se enfrenta a multas cuantiosas. Personalmente, creo que sería mejor si el sufragio fuese voluntario; de esta forma, votarían los que realmente quieren hacerlo, aquellos que se sienten representados.

2) ¿Qué sería lo primero que prohibirías?
Prohibiría el incumplimiento de promesas electorales.

Es una de los fraudes más comunes y uno de los que menos se reclaman. Estamos tan acostumbrados a ello que no nos sorprende; lo que es más, estamos convencidos que aquél a quien votemos cumplirá 1 de cada 100 promesas que hace... con suerte. La pena que le pondría: multas millonarias, años de encarcelamiento y servicio comunitario y la imposibilidad de ocupar cualquier otro cargo público en lo que le quede de vida (o más).

3) ¿Qué ministerio tendría más presupuesto?
"Educación" o tal vez "Ciencia y Tecnología".

Creo que son los grandes pilares de la sociedad actual. Una sociedad educada es una sociedad inteligente, que sabe lo que quiere y sabrá cómo conseguirlo; es por esto que muchos políticos no lo quieren así, es más fácil comprar a ignorantes. Por el otro lado, un país que invierte en ciencia y tecnología es un país que avanza. Todos los avances en dichas materias tienen un gran impacto en la economía ya sea como nuevas y mejoradas formas de producción, servicios o como investigaciones y proyectos que se pueden comercializar.

4) ¿Qué servicio público harías gratis?
Algo que en mi país es gratuito desde hace poco: la documentación.

Todos los habitantes de un país deben estar documentados adecuadamente. Es bastante razonable pensar que si alguna familia apenas si puede alimentar a sus hijos va a gastar dinero en documentarlo cuando pueden vivir perfectamente sin documentos. Por el otro lado, la documentación es de gran utilidad no sólo para uno - para poder acceder a muchos servicios - sino también estadísticamente hablando (composición de los grupos de edad, sexo, etc. ).

5) ¿A quien de tu familia harías ministro?
A nadie.

Una de las cosas que más le critico a la política actual es que cada uno que tiene un poquito de poder sólo se preocupa por sí mismo y por los que lo rodean. Los cargos deberán ser ocupados por gente idónea para el puesto, no por aquellos que a mí me convengan, o porque me caen bien, o porque les debo favores. Si alguien en mi familia está lo suficientemente capacitado para dicho puesto, entonces sí; pero de ninguna otra forma.

Estas fueron las 5 de este Viernes. Pido disculpas por la semana intermitente.

1 comentario

Patricia -

Coincido contigo en los puntos 3 y 5. En los demás, yo tendría otra opinión.
El punto 2 es el que me ha hecho pensar, porque estoy contigo en que deben cumplir todo lo que proponen en sus campañas electorales, pero imagínate cómo debe ser dirigir un país... No todo el mundo puede estar contento. Surgen problemas por el camino... y lo que dices de que no nos sorprenden los fraudes, es porque no nos queda ninguna gana de meter más problemas a nuestras vidas.
Eso pienso yo (intentaré arreglar el mundo desde la ciencia, porque la política no es lo mío).